El ChatGPT de OpenAI creó una revolución, no solo entre el público, sino entre el resto de las compañías tecnológicas. En el caso de Google, el chatbot llamado Bard ha sido criticado por su parecido con ChatGPT. La compañía salió en su defensa y dio algunas explicaciones.
De acuerdo con un artículo de The Information, Google está tan interesada en cambiar sus chatbots de IA que está obligando a su división DeepMind a ayudar al equipo de Google Brain a vencer a OpenAI con una nueva iniciativa llamada Gemini.
En el mismo informe, se sugería que Google se ‘rebajó’ tanto como para entrenar a Bard utilizando datos de ChatGPT, extraídos de un sitio web llamado ShareGPT. Al parecer, un ex investigador de Google AI se pronunció en contra del uso de esos datos, según la publicación.
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La respuesta de Google
- Chris Pappas, portavoz de Google, le dijo al sitio web The Verge, que la compañía nunca ha utilizado estos datos, “Bard no está capacitado en ningún dato de ShareGPT o ChatGPT”, explicó.
- Según The Information, un ingeniero de IA de Google llamado Jacob Devlin dejó Google para unirse de inmediato a OpenAI después de advertirlos sobre usar esos datos de ChatGPT porque violaría los términos de servicio de OpenAI y que sus respuestas se verían demasiado similares.
- En su lanzamiento a comienzos de febrero, Google explicó que Bard era un chatbot experimental construido con el modelo de lenguaje para aplicaciones de diálogo de la compañía LaMDA.
- LaMDA esperaba que fuera lo suficientemente potente como para convertir a Bard en rival de ChatGPT. Sin embargo, los inicios de Bard no han sido tan buenos.
Foto: FOLOU.