James Howells, un técnico informático del Reino Unido, continúa invirtiendo todo lo que tiene para tratar de conseguir en un vertedero de basura, ubicado en Newport, un disco duro que tiró en 2013 con 8.000 Bitcoins (unos 184 millones de dólares calculado al valor actual).
Si estás pensando en cómo pudo tirar a la basura algo tan valioso, Howells dijo en una entrevista a Business Insider que todo se trató de una equivocación al confundir dos discos idénticos: uno vacío y otro con el tesoro digital.
Nueve años después, el desesperado hombre continúa moviendo todos los medios posibles para tratar de convencer a las autoridades locales para que le concedan el permiso de excavar el vertedero, hoy convertido en un área verde en desuso.
Para recuperarlo, Howells ideó un plan que conlleva robots guardianes y una planta procesadora con Inteligencia Artificial (IA). A continuación, te contamos más detalles de este proyecto.
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Cómo James Howells pretende recuperar su disco lleno de bitcoins
- Howells explicó que su plan consiste en contratar a un equipo de profesionales que extraigan la basura del vertedero donde se encuentra el disco.
- Una vez extraídos los desechos (110.000 toneladas, para ser exactos), se llevarán a una planta procesadora.
- Esta planta se construirá solo para este propósito. De acuerdo con Howells, la basura se procesará y analizará mediante IA.
- Este plan podría llevar alrededor de tres años y una inversión de unos 11 millones de dólares.
- Además de esta planta, Howells informó que también pretende comprar dos robots Spot de Boston Dynamics que patrullen la zona para alertar de intrusos y examinar el suelo.
Cómo afectará al medio ambiente la excavación de un vertedero
- A pesar de los esfuerzos de Howells y hasta del ofrecimiento del 11% de ganancias tras la recuperación de los bitcoins, las autoridades locales se niegan a concederle el permiso.
- De acuerdo con los funcionarios, este plan es demasiado arriesgado desde el punto de vista medioambiental.
- De llevarse a cabo el plan, podría poner en circulación grandes cantidades de materiales tóxicos, incluido el metano que se liberaría a la atmósfera.
Foto: FOLOU