Hoy en día es común encontrar códigos QR en muchos establecimientos. Cuando visitas un restaurante, te inscribes en una página o realizas pagos, a menudo te proporcionan un código que facilita el proceso.
Estos códigos ganaron popularidad desde el COVID-19, ya que evitaban el contacto físico, permitiendo el acceso a lo que deseabas simplemente escaneando.
Sin embargo, ¿sabías que también pueden ser utilizados para fraudes cibernéticos? Conocido como quishing, este método emplea estos códigos para engañar a los usuarios y dirigirlos a sitios web maliciosos.
El quishing es similar al phishing, que engaña a las víctimas para robar sus datos personales a través de enlaces en correos electrónicos o mensajes. La diferencia es que en el quishing se utilizan estos escaneables, pero con el mismo propósito.
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Más sobre el quishing
- Las páginas web a las que dirigen estos códigos suelen ser casi idénticas a sitios legítimos, solicitando información personal y bancaria.
- Una vez obtenida esta información, los delincuentes la usan para actos ilícitos como transacciones no autorizadas o robo de identidad.
- A diferencia del phishing, el quishing impide a la persona ver el enlace al que será dirigido antes de escanear el código.
¿Dónde se pueden encontrar estas estafas?
Los códigos fraudulentos pueden aparecer en diversos contextos, tanto digitales como físicos: anuncios maliciosos en sitios web legítimos, carteles en lugares públicos, folletos o tarjetas de visita, correos electrónicos o mensajes que se hacen pasar por empresas conocidas.
¿Cómo protegerse del quishing?
Aquí algunos consejos de expertos:
- Elige un escáner de códigos QR con funciones de seguridad, ya que algunas aplicaciones pueden detectar redirecciones maliciosas.
- Mantén tu software antivirus actualizado. Aunque no siempre analiza directamente un código QR, puede identificar y bloquear descargas maliciosas o enlaces peligrosos después del escaneo.
- Antes de escanear un código QR, considera su origen. Si lo recibiste de una fuente desconocida o un correo electrónico sospechoso, podría ser una trampa.
- Después de escanear el código QR, observa detenidamente la URL a la que lo dirige antes de llenar cualquier tipo de datos y hacer clic.
- Asegúrate de que la dirección web parezca legítima y no contenga elementos inusuales.
- Mantente informado sobre las tácticas de los estafadores. Comprender cómo operan le ayudará a detectar estafas y señales de alerta en correos electrónicos y enlaces. Por ejemplo, ten cuidado con códigos QR que recibes por WhatsApp o mensaje de texto que ofrecen promociones o piden una acción urgente.
Foto: Archivo FOLOU