Un grupo de investigadores de la Universidad de Arizona, Estados Unidos, publicó dos artículos que descartan muchas de las teorías de conspiración que se originaron tras la aparición del virus de la COVID-19. Los investigadores creen que el verdadero origen de este virus es el mercado mayorista de mariscos de Huanan en Wuhan, China.
El grupo de investigadores está dirigido por el experto en evolución de virus de la Universidad de Arizona, Michael Worobey, en su estudio rastrearon las mutaciones del virus desde el inicio de la pandemia hasta el mercado, que vendía animales salvajes como zorros, perros mapaches y otros mamíferos vivos.
Los mamíferos son susceptibles a los coronavirus, y el virus podría haber pasado de huéspedes animales a humanos en el mercado. “Una ciudad que cubre más de 3.000 kilómetros cuadrados tiene la mayor probabilidad de contener el primer caso de la persona con COVID-19 en el mundo», dijo Worobey en un comunicado de prensa.
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Más sobre el verdadero origen de la COVID-19
- El primer estudio se centró en la ubicación geográfica de los casos, mientras que el segundo artículo analizó los datos genómicos del virus para ver si los animales en el mercado eran, de hecho, donde el virus contactó a un huésped humano.
- Los estudios descubrieron que dos linajes de SARS-CoV-2 provenían de dos infecciones separadas que se remontaban a animales.
- Estudios anteriores sugirieron que la primera infección provino de murciélagos y luego se transformó en el segundo linaje.
- El autor principal del estudio dijo que no estaba convencido por la primera línea de tiempo de mutación y dijo: “De lo contrario, el linaje A tendría que haber evolucionado más lento en comparación con el virus del linaje B, lo que simplemente no tiene sentido biológico”.
- Los animales podrían haber adquirido el virus de murciélagos portadores de coronavirus en la naturaleza y luego propagarlo a los humanos en el mercado.
- Los investigadores han dicho que esta propagación debería ser una lección para los científicos y funcionarios públicos sobre los riesgos asociados con los mercados de animales vivos. Adicionalmente, dijeron que se deben usar pruebas exhaustivas para prevenir futuras pandemias.
Imagen: Universidad de Arizona