¿Han evolucionado las videoconferencias corporativas? DTEN nos dice cómo

Iván Luzardo

, COLOMBIA

Debido a la pandemia generada por la COVID-19, que ha afectado el libre desenvolvimiento de las actividades, la tecnología propició que empresas de todos los ámbitos agilizaran sus procesos a través de herramientas que facilitan las nuevas formas de interactuar. Tal es el caso, de las videoconferencias.

En este contexto, las videoconferencias se volvieron pan de cada día para el trabajo y el estudio. De ahí que no sean iguales a las que teníamos dos años atrás. Hoy asistimos a una evolución sin precedentes en temas de software y hardware para comunicaciones.

Así, las personas se pueden comunicar de manera fluida, rápida y con mayor interacción que antes. Se trata de tecnologías que permiten a las personas ser más productivas y efectivas a la hora de trabajar desde cualquier lugar.

David Sandoval, gerente regional de DTEN para Latinoamérica, menciona que el cambio es bastante considerable, pues aunque ya conocíamos el tema de videoconferencia, solo existían pocas herramientas y formas de hacerlas. “Actualmente, por medio de diferentes plataformas, hardware y maneras es posible realizarlas ante distintas circunstancias. Lo que hemos aprendido es que la pandemia vino a cambiar toda esta metodología, el concepto y la forma en la que nosotros nos comunicamos y colaboramos”, menciona Sandoval, experto de esta empresa especializada en innovación y accesibilidad en videoconferencias.

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FOLOU: ¿Qué cambios consideran que han tenido las videoconferencias desde el año 2020 a la actualidad?

Ahora, las videoconferencias hacen parte de nuestro día a día , ya que no solo son implementadas por las personas que hacen labores empresariales, sino también por niños de pre-escolar,  primaria, secundaria, universitarios, abuelos, papás, mamás, y el público en general. 

Al hablar de cambios, uno de los principales es que antes al hablar de videoconferencias lo asociábamos con el término Skype. Ahora utilizamos el término Zoom. Anteriormente no nos interesaba y no nos importaba la calidad del video, del audio, del micrófono, ni de otros aspectos que configuran una videollamada.  Hoy día, como ya es parte de nuestra cotidianidad, de nuestro diario vivir, hemos profesionalizado e invertido en mejorarlas.

FOLOU: ¿Han evolucionado también los equipos?

La videoconferencia y las plataformas tanto de hardware como de software han evolucionado y han cambiado para bien, en cuanto que son más accesibles, más limpias, más claras y más nítidas. Tienen muchísimas más funciones que las que tenían anteriormente, sea de hardware o de software, y nos han llevado al siguiente nivel de experiencia en tema de videoconferencia. 

Estamos hablando de un paso gigantesco de lo que vivimos antes del 2020 a lo que estamos viviendo hoy en día.

FOLOU: ¿Cuál es su perspectiva en un futuro?

Las videoconferencias siguen evolucionando, siguen adaptándose a las necesidades de los clientes, siguen adaptándose a las necesidades del usuario. La perspectiva es que esto va a seguir, a continuar, ya sea híbrido, remoto, presencial, como lo queramos llamar. La tecnología de videoconferencia va a permanecer en nuestro diario vivir.

Hoy ya hablamos del metaverso, de videoconferencia interactiva, de conferencias 3D, de avatars, de una inmersión real de videoconferencia en donde no nada más se hacen dos planos, sino que de verdad podemos interactuar e intercambiar pensamientos e ideas. Esto puede ser a través de pantallas táctiles o soluciones que nos llevan a una videoconferencia inmersiva real.

En este sentido, vemos una forma de comunicarnos mucho ‘más presencial, pero de forma remota’.

FOLOU: ¿Cómo ha sido la receptividad de los usuarios?

Antes de la pandemia, las videoconferencias tenían que ser perfectas: tu oficina, tu fondo, el ruido; todo perfecto. No podía pasar nadie por atrás, ni tu perro ni tu hijo.

Hoy todo eso ha quedado atrás. La receptividad que hemos tenido, la forma en la que hemos adoptado y aceptado esta nueva forma de comunicarnos, nos ha llevado a que ‘no todo tiene que ser perfecto’. No obstante, sí debe serlo la parte en donde tú me puedes ver, en donde yo te escucho, en donde las personas me escuchan.

En los inicios de la pandemia, comenzamos a utilizar cualquier herramienta, plataforma o solución para poder dar y recibir nuestras clases y dar videoconferencias.  Nos adaptamos para poder realizarlas lo mejor posible.

Sin embargo, todo cambió y de ahí que la receptividad de los equipos de DTEN se haya dado a pasos agigantados, pues cada vez más se profesionaliza la solución y las empresas invierten en soluciones más robustas.

Imagen: DTEN

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